Holda

por | 4 junio 2016

Diosa nórdica.  Representa a la madre-tierra.  Era la encargada de repartir amor y fortuna; adelantaba por la noche el trabajo de las hilanderas; velaba por el orden doméstico y se le adjudicaban los escarmientos para la ineficiencia en el trabajo y en el orden doméstico. Protegía a los recién nacidos y otorgaba el don de la fecundidad a las mujeres. Premiaba las virtudes femeninas y castigaba la violencia.

Su pájaro mensajero era la cigüeña. Su energía daba origen a las tormentas de nieve, que provocaba sacudiendo el edredón de su lecho.

Aparecía cada año sobre un caballo blanco, seguido por un cortejo de mujeres y almas de niños muertos.

angelmayotarot,blogspot.com.es