Belerofonte

por | 23 junio 2021

Héroe griego. Hijo de Glauco (rey de Corinto) y Eurimede; en algunas versiones lo hacen hijo de Poseidón y Eurinome.  Nació con el nombre de Leofontes o Hiponoo, que se cambió tras asesinar accidentalmente a Beleno. Tras esta muerte tuvo que abandonar Corinto y buscó refugio en Tirinto, en la corte del rey Petro. Estebenea, esposa de Petro, se enamoró de Belerofonte, intentándolo seducir, pero éste la rechazó. Estebenea, ofendida por el rechazo, lo acusó, delante de su marido, de intentar seducirla y violarla.  Petro, creyendo la historia de su esposa y furioso por no poder asesinarlo debido a las normas de hospitalidad, encarga a Belerofonte de llevar una carta sellada, con una supuesta recomendación, a Licia, a la corte de rey Lobates (padre de Estebenea), en la que la verdadera misiva es que mate a Belerofonte.

Cuando Belerofonte llega a Licia es bien recibido por el rey Lobates. Durante los nueve primeros días, recibe toda clase de consentimientos, hasta el décimo día que Lobate abre la misiva. Para no ser él personalmente quien mate a Belerofonte, le pide que asesine a la Quimera, monstruo con cabeza y cuerpo de león, cola de serpiente y cabeza de cabra en su lomo, esperando  que no salga victorioso y que la bestia acabe con él. Belerofonte pidió consejo a Poliido para poder atrapar y matar a la Quimera. Éste le aconsejo que atrapara al caballo alado Pegado y con él se enfrentara a la bestia. Belerofonte fue hasta el monte Helicón en busca de Pegaso, pero no lo encontró allí; lo encontró en la fuente de Pirene de la Acrópolis de Corinto.

Puso sobre la cabeza del caballo una brida de oro, que le había entregado Atenea, y  logró domarlo. Junto con él voló hasta la Quimera y empezó a lanzarle flechas. Luego le arrojo su lanza entre las fauces, dentro de las cuales se derritió el plomo del  arma, que quemó las víscera de la Quimera y acabó con ella. Después de esto, sintiendo la necesidad de matarlo, Lobates lo envía a derrotar a los guerreros  sólinos, que estaban devastando la región y a luchar contra las amazonas, de ambas empresas salió victorioso. Aún así, Lobtes quería matarlo y envió a su mejores hombres, pero Belerofonte, los mató a todos.

Una vez reconciliados, Lobates creyó la historia de Belerofonte y le ofreció a su hija Filonde y con ella engendró a Hipoloco, Isandro y Laodamia.  Cuando Lobates murió, Belerofonte se convirtió en rey de Lacia.

Un día Belerofonte, montó a Pegaso y se encaminó a los cielos para comprobar la existencia de los dioses. Pero Zeus no lo consintió y clavó un agujión a Pegaso, que lo enfureció; esto provocó que Belerofonte, perdiera el equilibro y se precipitara al vacío. Según una traición no murió, sin embargo se quedó ciego o cojo . Pegaso remontó hacia el cielo y quedó convertido en una constelación.