Hija de Heracles y Deyarina. Cuando murió Heracles, ella y su familia, fueron perseguidos por Euristeo. Encontraron refugio en Atenas, donde el rey Demofonte, los acogió hospitalariamente.
Un oráculo, había asegurado la victoria de Demofonte, en la batalla que iba tener lugar con Eusisteo, si un hijo del héroe era sacrificado.
Macarla, que conocía el vaticinio, se presentó voluntaria para inmolarse.