Bianor

por | 25 noviembre 2013

Héroe, fundador de la ciudad de Madrid. La leyenda cuenta que Bianor era hijo ilegitimo de Tiberis, rey de Albania.  Para evitar conflictos a su muerte, para la sucesión al trono, entregó a Marto, madre de Bianor, una enorme suma de dinero, a cambio de que junto con  su hijo, abandonaran el reino.

Se dirigieron al Norte, donde Bianor, fundó la ciudad de Mantua, en honor s su madre. Siendo rey de Mantua, tuvo un sueño en el que el dios Apolo, le aseguraba una gran fortuna si se dirigía a la tierra donde muere el sol. Siguiendo sus indicaciones, junto con su ejército, abandonó Mantua. La travesía duró 10  años y una  noche.

Acampados en un alto del camino, volvió a aparecérsele el dios en sueños, para indicar que había llegado al lugar elegido para fundar una nueva ciudad, en la que pasaría el resto de sus días. Cuando despertó, se encontró en un prado lleno de vegetación, surcado por varios arroyos. Cerca de allí, se encontraban unas gentes apacentado sus rebaños. Al ser preguntados por su presencia, le contestaron que eran gente sin patria, que se hacían llamar los carpetanos, y esperaban una señal divina , para dejar de ser nómadas y establecerse en algún lugar.

Al contarles el sueño que había tenido, comprendieron que era  la señal que estaban esperando y comenzaron a construir la muralla, el caserío y el palacio de la nueva ciudad. Al construir el templo, surgió el primer conflicto: ¿a que dios debían  consagrarlo?.  Como no se ponían de acuerdo, Bianor convocó a Apolo en sueños para que éste resolviese  el problema.

La respuesta de Apolo fue que la ciudad, y por tanto el templo, debía consagrarse a la diosa Metragirta, diosa de la Tierra, hija de Saturno, que había ofrecido su propia vida para que desapareciera la discordia. Al despertar convocó a su pueblo para comunicarles la decisión de Apolo. Al mismo tiempo mandó cavar un  foso, se introdujo en él y hizo que lo  taparan con una losa

Carpetanos y soldados, se sentaron a orar encima de la losa y al poco rato, se formó una tormenta en la sierra vecina y a través de ella, apareció la diosa Metragirta, sobre un carro tirado por dos leones. Sacó a Bianor de la tumba y lo hizo desaparecer.

A la ciudad la llamaron Metragirta, después fue Magerti y finalmente Madrid.