Dios de la caza y de la taiga entre los tunguisos, buriatos y yakutos (Siberia Oriental). Lo imaginan antropomorficamente como un anciano de blancos cabellos, habitante de la taiga. Bainaca envía al cazador los animales que podrá cobrar, pero tambien, raramente, las enfermedades que lo obligan a solicitar la intervención del chamán (v. chamanismo). Se le consagran caballos y renos blancos para que sirvan de montura al dios y de intermediario entre él y los hombres. Bainaca recibe sacrificios de animales y cereales y le acompaña siempre un gran perro, que los siberianos afirman encontrar.
bibliografia diccionario enciclopédico Salvat Universal 15º ed 1981