Patroclo

por | 2 febrero 2014

Hijo de Menecio de Opus y de Polimela. Siendo muy joven, en unos juegos, mató accidentalmente a Clitonimo, Hijo de Anfidamas, y tanto él como su padre tuvieron que huir del país. Encontraron refugio en la corte del rey Peleo, padre de Aquiles, y entre los dos jóvenes surgió una gran amistad, hasta el fin de sus días.

Patroclo junto con Aquiles, se formó con el centauro Quino, y de él aprendió a combatir, la oratoria y la curación.

El vínculo era tan intenso, que cuando llegó la guerra de Troya, Patroclo se une incondicionalmente al ejército de Aquiles. Era especialmente habilidoso en la conducción del carro de combate, logrando dirigir los caballos con gran habilidad, Se ganó la admiración de todos los guerreros griegos y del resto de los troyanos, sus rivales. Se mostró siempre dispuesto a sacrificarse por el resto de combatientes

Apoyó a  Aquiles, cuando este se negó a volver a la batalla y se retiró con sus hombre. A partir de este momento, los troyanos comenzaron a ganar terreno y amenazaban con quemar los navíos de los griegos.

Patroclo, al ver que lo troyanos iban cayendo, rogó a Aquiles, que tomara las armas y  saliera al campo de batalla a ayudar a sus compañeros. Pero éste se negó, dándole permiso para que cogiera sus armas y comandara a los mirmidones en el campo de batalla. Patroclo, se puso la armadura y el casco de Aquiles y con su lanza y al frente del ejército mirmidón salió al campo de batalla. Los griegos, pensaron que era Aquiles quien había vuelto y algunos se retiraron por miedo, ya que Aquiles era invencible.

Patroclo logró asesinar a Sarpedon (hijo de Zeus), pero no tuvo suerte delante de Héctor, que lo asesinó, pensando que era Aquiles, sólo cuando le sacó el casco se dio cuenta de la verdad.

Ayax y Menelao se llevaron el  cuerpo de Patroclo, al campamento griego. Aquiles, lloró sobre  el cuerpo de su amigo y volvió a la  lucha, para vengarlo. Después de incinerarlo, ofreció un gran festín en honor a Patroclo y toda clase de sacrificios.