Dédalo

por | 8 diciembre 2013

Inventor ateniense. Fue un hombre admirado e inteligente, pero la inteligencia que poseía para realizar sus inventos , no la tenia en sus relaciones personales, ni tampoco poseía inteligencia emocional.  Se le atribuye la invención de la vela, el mástil, el pegamento, el hacha, la plomada, algunos edificios, obras de arte y diversas herramientas. Creó estatuas de madera con articulaciones que permitían que se desplazaran

Tuvo un hijo, Icaro.

Le enviaron a su sobrino Talo para que le enseñara todo lo que sabia; Talo que inteligente como él, pronto empezó a construir su propios inventos.  Inventó ls sierra, inspirándose  en una espina de un pez; con dos pedazos de hierro construyó un compás.

Dédalo celoso de los avances de Talo , decidió llevarlo al templo de Atenea y en  un descuido la envidia hizo que lo empujara, provocando el enfado de la diosa, que para salvar a Talo lo convirtió en perdiz y Dédalo como castigo fue desterrado de aAtenas.

Se refugió  en la isla de Creta, donde reinaba el rey Minos. Allí prestó sus servios al rey  durante un largo tiempo. Una de sus creaciones en Creta, fue el gigante de bronce que servía para defender las costas de posibles invasiones; también le construyó a la hija menor del rey, Ariadna, una pista de baile.

Otra de sus creaciones fue una estructura con forma de vaca, pedida por la reina Pasifae, la esposa del rey Minos. El dios Poseidón, le pide a Minos que sacrificara a su mejor toro, promesa hecha al dios y que el rey no cumple. Poseidón tomo represalias contra Minos. Hizo que su esposa, Pasaife, se sienta atraída fuertemente por el animal y con la estructura en forma de vaca, que estaba hueca por dentro, la reina escondida aguardaba a su amante. Los deseos de la reina fueron cumplidos y a los nueve meses dio a luz a una horrible criatura:  mitad hombre y mitad toro, conocido como Minotauro.

Esta criatura horrorizó al rey y nuevamente requirió los servicios de Dédalo, para que construyera un laberinto, para esconder a a la criatura. Junto con su hijo Icaro crearon el laberinto que contaba con una entrada y salida que solo conocían ellos. Tenía muchas calles que iban es distintas direcciones con el fin de que no se encontrara la salida. Según afirman, contaba con dos torres, en la que estaban encerrados Dédalo y su hijo, siguiendo órdenes del rey, pues no quería que nadie se enterara de como salir. Para poder escapar del laberinto, Dédalo construye unas alas, con cera de abeja, para salir volando como pájaros. Aunque Dédalo advierte a su hijo de que no se acerque demasiado al Sol, éste empieza a elevarse demasiado y la cera se derrite provocando que Icaro se estrelle en el mar y muera ahogado, pero Dédalo llegó a Sicilia, donde el rey Cócalo, no duda en ofrecerle hospitalidad. Pasa largo tiempo en Sicilia, donde realiza  múltiples inventos.

El rey Minos, que sospecha de Dédalo esta vivo, para atraparlo idea una recompensa para quien resuelva un problema, sabiendo que Dédalo no se resistiría al desafío: adivinar como mover una cuerda a través de la concha de una caracola, sabiendo que Dédalo era  el único capaz de resolverlo. Cócalo sin pensar que era una trampa para atrapar a Dédalo le pide ayuda para resolver el problema y éste le  resuelve el acertijo: hace un agujero en la concha y ata una hormiga a un cuerda y ésta se desliza a través del agujero. Cócalo una vez resuelto el problema, se lo envía al rey Minos y éste, sabiendo así, que Dédalo está en Sicilia, sale de inmediato.

Pero Cócalo fue informado de que era una trampa para capturar a Dédalo. Juntos idearon un plan. Pues el rey no  estaba dispuesto a perder al inventor. Dédalo. Construyó una bañera, instalando un tubería que llevaba agua caliente. Cuando Minos llegó, el rey le ofreció un baño  con sus hijas, al cual no pudo negarse. Minos se dirigía al palacio, pensando que después del baño, atraparía a s u enemigo, pero no contaba que la víctima era él. En el momento en que Minos se sumergió en la bañera y tomando las precauciones para que las hermosas muchachas no se mojaran, abrieron los grifos que contenían agua hirviendo. Maldiciendo a Dédalo, finalmente falleció y éste se liberó de su enemigo.

Murió probablemente en Sicilia.