Hijo de Eumeleo, nacido en Tebas. Junto con su padre honraban al dios Apolo.
Un día mientras su padre estaba realizando un sacrificio, en el que Botres le ayudaba, éste esparció sobre el altar los sesos de la víctima, un cordero , antes de colocarlo sobre el altar para el ofertorio. Eumelo, indignado por la acción, cogió un tizón de la hoguera sagrada y con él le asestó un golpe que le produjo la muerte.
Apolo, ante la pena de sus padres, lo convirtió en el pájaro Aeropo , el pájaro de mirada sombría, que hace el nido bajo tierra y que no cesa de revolotear.